El flemón o absceso dental es uno de los problemas bucales más comunes y, sin embargo, uno de los problemas bucales más dolorosos.
Sus síntomas son fácilmente identificables por ser muy visibles, pues generalmente provocan una inflamación en algún punto de la mandíbula. No obstante, para evitar las molestias que pueda acarrearnos, conviene identificar y abordar este problema lo antes posible.
Por ello, desde la clínica del Dr. Viso queremos contarte todo lo que necesitas saber para prevenir un flemón en la boca y la mejor forma de tratarlo, pero antes veamos qué es y por qué aparece. Comencemos:
Qué es un flemón
Un flemón o absceso dental es una inflamación localizada en la encía, la cual suele producirse por una infección bacteriana, cuyo origen suele producirse en la superficie del diente, para terminar accediendo hasta la pulpa y raíz del mismo. Cuando esto sucede, se forma un depósito de pus en la zona periapical, el cual genera una inflamación del tejido blando.
De este modo, de no detener el avance de la infección a tiempo, las bacterias terminarán alcanzando los huesos que soportan el diente, poniendo en peligro su integridad.
Por qué salen los flemones dentales o absceso dental
Las causas que pueden producir un flemón en la encía están directamente relacionadas con la aparición de bacterias que penetran en las capas internas de los dientes. Así, las causas principales que provocan su aparición son:
- Caries que no hayan sido tratadas.
- Enfermedades periodontales, como son la gingivitis y periodontitis.
- Un fuerte traumatismo o presión constante.
Independientemente de si el flemón es causado por una caries o una enfermedad periodontal, una vez que las bacterias alcancen las capas internas del diente, pueden afectar también a la cavidad pulpar. Comúnmente conocida como nervio, esta es la zona que alberga los vasos sanguíneos de la pieza.
Cuando el tejido se ve afectado por una infección, puede inflamarse y desarrollar una patología llamada pulpitis, que puede ser reversible o irreversible. De darse el segundo caso, el nervio se necrosa e, inevitablemente, se formará un flemón dental.
Entre las consecuencias de sufrir un flemón, encontramos:
- Dolor intenso y punzante. Suele aparecer repentinamente, manifestándose tanto en reposo, al morder e incluso al tocar la zona afectada.
- Sensibilidad dental.
- Inflamación visible del rostro, a la altura de las mejillas.
- Malestar general.
- Halitosis y mal sabor de boca.
- Fiebre, en los casos en que la infección esté muy avanzada.
- Dificultades al masticar e incluso al abrir la boca.
- En caso de pulpa necrosada, el diente irá tornándose de un color oscuro.
Cómo aliviar el dolor
Por normal general, dolor generado por un flemón es tan intenso que los pacientes no dudan en acudir rápidamente a la clínica. De hecho, lo más recomendable es que nos pongamos en manos de un especialista cuanto antes, para evitar que el diagnóstico se complique.
De este modo, el dentista podrá determinar el origen del flemón dental y nos pautará un tratamiento específico para curar la infección. En caso contrario, no conseguiremos eliminarlo por completo y podrá volver a aparecer de forma reiterada.
En situaciones excepcionales en las que no podamos acudir a la clínica inmediatamente, podéis realizar enjuagues con una solución de agua, sal y bicarbonato de sodio. Sin embargo, esto no deberá sustituir la cita con el dentista o la cosa podría complicarse.
Qué tratamientos existen para tratar un flemón en la boca
Para tratar el flemón, solemos actuar en dos fases. En la primera trataremos de eliminar la infección, mediante la receta de antibióticos, y mitigar el dolor y la inflamación, mediante antiinflamatorios.
Transcurridos 8 días, valoraremos el efecto conseguido con el tratamiento pautado, determinando si es necesario llevar a cabo un procedimiento adicional, que suele ser una endodoncia para conservar un diente que, de otro modo, tendría que ser extraído.
Sin embargo, también es importante señalar que la infección debe haber remitido completamente antes de llevar a cabo el tratamiento de endodoncia.
Cómo puedo prevenir la aparición de un flemón
Dado que el absceso dental tiene su origen en la presencia de bacterias en la boca, es de vital importancia mantener una higiene oral rigurosa.
Por ello, nos sentimos en la obligación de recordar la importancia de dedicar al menos 2 minutos al cepillado diario después de cada comida y, al menos una vez al día, utilizar la seda y un enjuague bucal. Con ello no solo lograremos evitar este tipo de infecciones, sino también otras enfermedades.
Tampoco debemos olvidar acudir de forma rutinaria a nuestro dentista, a pesar de que no presentar aparentemente ningún problema. Como ya hemos mencionado, un flemón dental es el resultado de un avance constante de las bacterias en nuestros dientes. De hecho, en las fases iniciales, es poco probable que nos percatemos de él, mientras que a un profesional le bastará con echar un vistazo.
Y es que detectar y tratar el problema en su etapa más temprana evita tener que recurrir a técnicas más invasivas y caras, como puede ser una endodoncia. En la clínica del Dr. Viso podremos brindarte la solución que necesitas para curar tu flemón dental.
